Musume Janakute Mama ga Suki nano!? Volumen 4 Capítulo 4

P009-260_娘じゃなくて私が好きなの!?_4_3220100001

Temprano por la mañana del día siguiente después de las vacaciones de Obon.

“…Fwaaaah…”

Me costó despertarme.

No dormí lo suficiente.

Anoche volví de la casa de mis padres y me fui a la cama antes de las doce… pero estaba tan nerviosa por lo de hoy que no pude dormir.

Hoy responderé a la confesión de Ta-kun.

Le explicaré lo del beso y por qué le rehuí después y también le revelaré mis sentimientos.

Y entonces… empezaremos a salir.

Probablemente.

…T-Todo va a estar bien, ¿verdad?

Esta vez sí vamos a empezar a salir, ¿verdad?

Ta-kun no dirá “Mejor, déjame pensarlo un poco”, ¿verdad?

No empezó a pensar algo como “A pesar de que es una mujer adulta, es tan problemática”, ¿verdad?

Aunque, para ser honesta, no puedo culparlo si comenzó a pensar eso.

He hecho más que suficiente para que lo haga.

Haah… Me pregunto si todo realmente va a estar bien…

“…¡T-Todo estará bien! ¡Definitivamente!” Me convencí desesperadamente.

Sí, sí, estoy segura de que todo estará bien.

Mejor dicho… es demasiado tarde para echarme atrás ahora, tengo que seguir adelante.

“Bien.”

Después de explicarme a mí misma, salí de la habitación y comencé mis actividades matutinas.

El reloj marcaba las ocho de la mañana.

Miu todavía sigue durmiendo, así que el desayuno puede esperar.

Mientras tanto, aprovecharé el tiempo para hacer los otros quehaceres del hogar.

Y me reuniré con Ta-kun a las… En realidad, aún no está decidido.

Dije que hoy, pero no dije exactamente a qué hora. Me pondré en contacto con él más tarde y acordaré la hora y el lugar.

No tengo idea de lo que pasará y eso me pone nerviosa… ¡pero seguro que todo saldrá bien!

¡Incluso escribí una carta por si acaso!

Escribí una carta en mi tiempo libre mientras estaba en casa de mis padres.

Mis sentimientos por él están escritos de forma poética, aprovechando al máximo mis habilidades editoriales e ingenio. Si empiezo a ponerme nerviosa y no puedo decir nada, solo tengo que leer esta carta.

…Puede ser penoso que una mujer de más de treinta años prepare una carta de amor de su puño y letra, ¡pero no se puede evitar!

¡Porque esta carta de amor es mi guía salvavidas!

¡Un seguro en caso de que ocurra un accidente!

En el peor de los casos… si acaba ocurriendo una catástrofe y salgo huyendo porque me puse muy nerviosa, ¡mientras le dé la carta, él sabrá cómo me siento…!

“Empezaré… lavando la ropa.”

Era una situación apremiante, pero eso no significaba que podía eludir los quehaceres del hogar.

Es lo que tiene ser una madre soltera.

En la primera mitad del día tenía que ocuparme de todos los quehaceres.

Y primero tocaba la colada.

Tengo que lavar la ropa que usamos durante el viaje.

Fui al vestidor y me encontré con una gran pila de ropa que saqué ayer de nuestras maletas. Separé la ropa blanca para lavarla después y eché el resto en la lavadora.

“…Ah, cierto. Voy a lavar esto también.”

Me quité el sujetador para dormir que estaba debajo de mi pijama. En verano, sudo incluso cuando duermo, así que tengo que lavar mis sujetadores para dormir regularmente.

Metí la ropa interior en una malla especial y encendí la lavadora.

“Ahora, a limpiar la casa… ¡Oh, no!”

Medio dormida, estaba a punto de pasar a la siguiente tarea cuando me di cuenta de algo importante.

“¡Hoy es el día de sacar la basura quemable!”

¡Lo olvidé completamente!

¡El día de recolección es justo después del Obon!

Esto es malo… Definitivamente tengo que sacarla hoy. ¡La basura que olvidé sacar antes del Obon todavía está en el depósito de afuera…!

¡Uwaah, esto es terrible!

¡El camión de la basura pasará en cualquier momento!

Me cambié rápidamente el pijama y salí corriendo apresuradamente por la puerta. Cogí la bolsa de basura del depósito y corrí frenéticamente hacia el contenedor de basura.

Afortunadamente, logré tirar la basura a tiempo.

Inmediatamente después de tirarla, el camión de la basura pasó.

“Haah… Menos mal”, suspiré con alivio y volví a casa.

Eso estuvo cerca, lo logré apenas por los pelos.

Me alegro de no haber tenido que encontrarme con los recolectores de basura.

Porque ahora, yo…

“……”

Eché un vistazo a mi pecho.

Allí… mi pecho se balanceaba con cada paso que daba con un boing boing.

Se balanceaba mucho más fuerte de lo habitual.

Como si hubiera sido liberado de su pesada armadura… como si no llevara sujetador.

“……”

Eso es.

Fui a sacar la basura sin sujetador… Después de quitarme el sujetador para dormir, me entró pánico, me cambié y salí corriendo y me olvidé de ponerme otro sujetador.

Me di cuenta en el camino, pero no había tiempo para volver… así que salí así.

Uwaa, siento que acabo de hacer algo terriblemente indebido.

Salir a sacar la basura sin sujetador… ¿Qué clase de mujer tan procaz soy?

Además, en este momento solo llevaba puesto una delgada blusa blanca. Y debido al hecho de que no llevaba sujetador, si me miraban fijamente por un momento, podría verse todo.

Ah, maldición, tengo que regresar a casa rápidamente.

Si alguien me ve así, no podré caminar por el vecindario nunca más…

“Ayako-san…”

“¡¿~~~~?!”

De repente.

Me crucé con Ta-kun por casualidad de nuevo frente a mi casa.

Porque somos vecinos.

Porque vive al lado.

Me olvidé de eso inconscientemente. Había decidido contactarlo más tarde e intentar quedar con él por la tarde, pero eso no garantizaba que no me encontrara con él antes de eso.

Ta-kun llevaba una camiseta en la parte superior y shorts y leggins en la parte inferior. En los pies llevaba unos tenis deportivos modernos de un color fluorescente. Era un estilo de corredor.

Él solía nadar en la secundaria y preparatoria y ahora estaba en un club deportivo, por lo que a veces sale a correr por allí. No parecía estar sudando, así que supuse que apenas iba a salir.

“B-Buenos días. Hace tiempo que no nos vemos”, me saludó Ta-kun con una sonrisa torpe en su rostro.

Había suficientes razones para sentirse incómodo y estoy segura de que tenía muchas cosas en la cabeza, pero trató de comportarse como de costumbre por mi bien.

Y sin embargo, yo…

“~~~~~~”

Sin decir nada, le di la espalda rápidamente.

Y me cubrí el pecho con ambas manos.

“Eh…”

“L-Lo siento, Ta-kun… ¡A-Ahora no es un buen momento…!” grité casi llorando y me apresuré a escapar.

¡Ah, cielos, ¿por qué…?!

¡¿Por qué tengo tan mala suerte?!

Volví a huir de Ta-kun.

Repetí lo mismo que hice antes del Obon.

¡Así no es como debería ser!

Decidí que no huiría más. Durante el Obon, me enfrenté a mí misma y me decidí. Había desechado mi débil mentalidad de alterarme y huir aunque me cruzara con él.

Pero.

Pero aun así… ¡no estaba preparada para encontrarme con él sin sujetador!

No puedo, no puedo, no puedo… Si hablamos cara a cara, definitivamente se dará cuenta.

Y si lo hace, se sentirá decepcionado de mí. ¡Pensará algo como “Oh… Ella es el tipo de mujer que saca la basura sin sujetador…”!

Por eso… no tengo más remedio que correr.

Lo siento, lo siento, Ta-kun, ¡lo siento mucho…!

¡No estoy rehuyéndote!

¡No estoy escapando!

¡Esto es un retiro estratégico para proteger mi honor como mujer!

Lo más importante… te lo diré luego, cuando prepare mi mente, ¡y un sujetador!

“…Hah, hah.”

Corrí hacia la puerta de mi casa y me detuve para recuperar el aliento.

Me sentí atormentada por una intensa sensación de culpa, pero tenía que ponerme un sujetador lo antes posible, así que alcancé el pomo de la puerta y en ese momento…

Abrazar.

Me abrazaron por detrás.

Fue tan repentino que hizo que mi corazón diera un salto.

“No te dejaré escapar, Ayako-san.”

“T-Ta-kun…”

Escuché una voz familiar cerca de mi oído.

No fue hasta un poco después que finalmente entendí la situación.

Ta-kun me persiguió y me abrazó por detrás.

Un abrazo por detrás.

La fantasía que un día vi en un sueño que delataba que había nacido en la era Showa.

Esa fantasía era ahora una realidad.

“ …Ya he llegado a mi límite. No puedo soportarlo más.” Cerca de mi oído escuché una voz que temblaba de impaciencia y nerviosismo.

Y sin embargo… sonaba tremendamente apasionada.

Era una voz llena de un deseo que parecía que ya no podía ser reprimido.

“…¿Tienes idea de lo angustiado que estaba? Me besaste de repente y luego me dejaste esperando… Pensé que hoy oiría la respuesta… pero intentaste escapar de nuevo.”

“N-No…”

¡Hoy es diferente!

¡Esta no es la misma huida que antes del Obon!

¡Me decidí a hablar con Ta-kun apropiadamente!

Pero… ¡ahora mismo no llevo sujetador!

¡Nunca me decidí a hablar con él sin sujetador!

Quería explicarle todo eso, pero no había manera de que pudiera hacerlo… En su lugar, él me interrumpió y me abrazó aún más fuerte.

“¡No puedo soportarlo más…!” dijo.

Con una voz que parecía haber llegado al límite de su autocontrol.

 

“Realmente te amo, Ayako-san.”

 

Pensé que me derretiría.

Palabras de amor del hombre que amo me fueron susurradas tan cerca al oído que pude oír su respiración. Eran más fuertes que cualquier veneno y más dulces que la miel y enturbiaron mi corazón y mi cabeza.

“Te amo… Realmente te amo, Ayako-san.”

Repitió sus palabras de amor, como si una presa se hubiera roto dentro de él.

Los sentimientos que había retenido durante mucho tiempo se desbordaron.

“Te he amado durante diez años. Desde que tenía diez años, te he estado mirando y pensando en ti todo el tiempo.”

Recordé los últimos diez años, los días en que ni siquiera pensaba en él como un hombre.

“Desde que me declaré en mayo, estos sentimientos no han cambiado para nada… No. Te amo mucho más ahora que cuando me confesé.” Las palabras apasionadas no se detuvieron. “Después de que me declaré… estuviste muy preocupada y alterada, y aunque eres una adulta, te pusiste nerviosa como una adolescente… y eso te hizo parecer muy linda y encantadora. Vi muchas facetas tuyas nuevas que no conocía y me enamoré aún más.”

Recordé los días desde que me confesó su amor hasta hoy y empecé a pensar en él como un hombre.

“Realmente te amo tanto… que no puedo soportarlo más. No quiero entregarte a nadie. Quiero estar contigo para siempre.”

Fueron palabras francas.

Sinceras y sin adornos.

Su abrazo se hizo aún más fuerte.

“Ayako-san… ¿Por qué me besaste el otro día?”

“…E-Este…”

Ante mi indecisión para hablar, Ta-kun continuó hablando con una voz que podría romperse en cualquier momento.

“Después del beso… estuve pensando en ello todo el tiempo. ¿Por qué hiciste eso? Pensé en todo tipo de cosas, fantaseando con esto y aquello.”

“……”

“Pero al final, solo pude llegar a una respuesta. Tal vez sea solo mi deseo, tal vez sea solo mi vanidad… pero no puedo evitar pensarlo”, su voz tembló, como si estuviera a punto de llorar.

Pero no de dolor.

Sino más bien… de esperanza.

“Ayako-san… La Ayako-san que conozco no habría besado a un hombre que no ama.”

“……”

“Por eso, en ese sentido…” dijo Ta-kun.

Con una voz que sonaba como si estuviera a punto de romperse, gritó y preguntó:

 

“Tú también me amas, ¿verdad?”

 

Una emoción indescriptible se desbordó de mi pecho y se extendió por todo mi cuerpo.

Fue como si me hubiera golpeado un violento rayo, pero al mismo tiempo, todo mi cuerpo se extasió por una sensación suave y dulce.

Todo mi cuerpo se calentó y mis incontrolables sentimientos se desbordaron.

“…Sí”, asentí fuertemente.

Afirmando totalmente sus palabras.

“Te amo… te amo mucho, Ta-kun.”

P009-260_娘じゃなくて私が好きなの!?_4_3220100001

Yo… lo dije.

Finalmente pude decirlo.

Por fin pude expresar lo que había decidido en mi corazón.

Quizás por fin he podido devolverle un poco a él, que me amaba tanto que hasta me hacía sentir un poco culpable.

“Me enamoré de ti, Ta-kun… Cuándo… no lo sé… no lo sé, pero te amo… Ahora te amo mucho.”

Mis incontrolables sentimientos se alborotaron como una tormenta, pero se atascaron en mi garganta y no pude articular bien.

Aun así, mis sentimientos siguieron fluyendo con palabras entrecortadas.

“Después de que te me declaraste, lo único en lo que podía pensar era en ti… Todos los días mi cabeza estaba llena de ti, Ta-kun. Después de todo, tú… siempre estás haciendo cosas geniales, así que comenzaste a ocupar más y más espacio en mi cabeza…”

Ni yo misma sabía ya de qué estaba hablando.

Simplemente me dejé llevar por mis instintos y sentimientos.

“Después del viaje, hablé con Miu de varias cosas… y finalmente entendí mis sentimientos. Te amo, Ta-kun. No como vecino, ni como hermano o hijo… sino como hombre.”

No saqué la carta que escribí.

Y no recuerdo lo que escribí allí.

Lo único que salió de mi boca fueron palabras simples, sin adornos, que no eran ni poéticas ni ingeniosas y que carecían de cualquier habilidad editorial.

“Y cuando me di cuenta… creo que te he amado durante mucho tiempo. Todos estos diez años que he pasado contigo… ¡han sido irremediablemente queridos y preciosos…! No sé si fue a amor a primera vista o si fue el destino el que nos juntó… ¡pero pone muy feliz pensar que fue así…!” dije.

Puse suavemente mi mano en la suya mientras me abrazaba.

“Te amo… te amo mucho, Ta-kun.”

“¡Ayako-san…!”

La fuerza puesta en sus brazos se hizo aún más fuerte.

Un abrazo apasionado y gentil me envolvió. Había una parte de mí que quería quedarse en sus brazos para siempre, pero lentamente aparté sus brazos.

Me di la vuelta y finalmente lo miré de frente.

Cuando volví a mirar a Ta-kun, parecía que estaba medio llorando. Había lágrimas en la esquina de los ojos y tenía una expresión muy emocional, sin nada de dignidad ni compostura.

Pero probablemente yo tenía un aspecto peor.

Mis ojos estaban llenos de lágrimas.

No estaba triste, pero estaba muy emocionada y no podía dejar de llorar.

“Ta-kun…” dije, mirándolo a los ojos. “Yo también te amo. Así que… si es posible, me gustaría salir contigo.”

Pero, dije.

“¿De verdad… estás bien conmigo?” Tenía que preguntar eso. “Yo… soy diez años mayor que tú.”

“…¿Por qué preguntas eso ahora?”

“Incluso si es por muy, muy poco… nací en la era Showa.”

“Lo sé.”

“Tengo una hija.”

“También sé eso. Lo sé desde hace diez años.”

“Yo realmente no soy una gran mujer en absoluto… Soy muy densa, tengo muchas deficiencias, no sé qué hacer cuando aparecen dificultades y me gusta holgazanear al hacer los quehaceres del hogar… Además, he ganado un poco de peso últimamente. Aunque parece que he estado diciendo esto durante diez años…”

“……”

“¿A pesar de que soy así, realmente quieres estar conmigo?”

“Sí”, Ta-kun asintió sin dudarlo. “Te amo así.”

Siempre lo he hecho. Y siempre lo haré, dijo.

Y sonrió suavemente.

“…Ta-kun.”

Conmovida por la emoción que sentía, lo abracé.

No por atrás, sino de frente.

“Lo siento… Lamento haberte hecho esperar tanto, Ta-kun.”

“Descuida, no pasa nada.”

Él me devolvió el abrazo.

Confirmando los sentimientos del otro, nos abrazamos fuertemente.

Una felicidad indescriptible nos envolvió.

Oh…

Qué feliz estoy.

Todo parece tan grato y me siento como si estuviera bendecida por todo el universo.

¿Es posible ser tan feliz en este mundo?

“Estoy muy feliz… increíblemente feliz. Es como un sueño. No puedo creer que vaya a salir con Ayako-san… ¿Eh?”

Con una voz sorprendida, regresó de su estado soñador al mundo real.

Ta-kun se alejó de repente de mí.

“¿Eh? ¿Eh…?”

Me miró fijamente con una expresión de asombro y confusión.

Concretamente, alrededor de mi pecho.

“A-Ayako-san… ¿Por qué estás sin s-sostén?”

“Eh…  ¡¿~~~~?!”

Por un momento no sabía de qué estaba hablando, pero enseguida lo entendí e inmediatamente cubrí mi pecho.

¡N-No puede ser~~!

¡Lo olvidé por completo!

¡Me dejé llevar tanto por la atmósfera que lo olvidé por completo!

¡No llevo sujetador ahora mismo!

¡No llevaba sujetador durante la conmovedora escena de la confesión!

“…¡N-No! ¡Esto no es lo que parece!”

Uwaa… Uwaaaa, esto es horrible.

No quería que Ta-kun lo notara.

Es porque lo abracé de frente.

Por supuesto que lo notaría.

Los dos llevábamos ropa ligera, pero nos abrazamos con fuerza y mi pecho se presionó contra él.

“Este, verás… estaba sacando la basura… ¡Normalmente no salgo sin sujetador! Pero hoy me quedé dormida y tenía prisa, así que olvidé por completo ponérmelo…”

“Ya veo… Ah. Entonces… la razón por la huiste cuando me viste…”

“…¡S-Sí! ¡Hui porque no llevaba sujetador! ¡No quería que te dieras cuenta! Y sin embargo, tú… me perseguiste.”

“L-Lo siento, pensé que me estabas evitando de nuevo.”

“Uuh… No es así. Hoy no iba a evitarte, iba a responder a tu confesión… Realmente planeaba hacerlo.”

Solo que nada salió según lo planeado.

¿Por qué tuvo que pasar esto?

Estaba lista para derramar lágrimas completamente diferentes a las de emoción de antes.

“Uuuh… ¿Cómo sucedió esto? El día en que comencé a salir con Ta-kun, ¡no llevaba sujetador…! Esto es algo que probablemente recordaré por el resto de la vida. ¡Cada vez que celebremos nuestro aniversario, me atormentará esta vergonzosa página cuando lo recuerde…!”

“…P-Pues celebremos un aniversario así juntos muchas veces a partir de ahora.”

“S-Sí…”

Ta-kun me dio una sonrisa torpe pero amable, tratando de apoyarme, y asentí.

Yo, Ayako Katsuragi, tengo 3X años.

Han pasado diez años desde que acogí a la hija de mi hermana y su marido.

Y por primera vez en mi vida, tengo un novio.

Di muchos rodeos antes de que empezáramos a salir, e incluso en el momento en que empezamos a salir, dije puras tonterías hasta el final.

Pero de alguna manera, quería pensar positivamente que todas estas complicaciones mías me hacían quien soy.

 

Por la noche…

“Jajaja. Ya veo. Finalmente empezaron a salir.”

Cuando informé de nuestra relación por teléfono, Oinomori-san se rió satisfecha.

“Vaya… sí que tomó mucho tiempo. Si yo, que soy una tercera, me siento así, no quiero ni imaginar todo lo que tuvo que soportar Aterazawa-kun.”

“En cuanto a eso… no tengo nada que decir.”

“De todas formas, felicidades de todo corazón.”

“Gracias. Realmente te agradezco por todo tu apoyo, Oinomori-san.”

“Yo no hice nada. Simplemente me estuve burlando de ti”, dijo, tratando de quedar bien.

Aunque bueno… es posible que no estuviera tratando de quedar bien y en realidad sí se estuvo burlando de mí.

“Katsuragi-kun”, dijo, bajando ligeramente su tono. “Estoy segura de que estás muy emocionada por haber podido superar todos los obstáculos y haber empezado a salir con él… pero lo más difícil empieza a partir de ahora.”

“…Lo sé”, asentí seriamente.

Lo sé.

Lo más difícil está por venir.

Si se tratara de un cuento de hadas, cuando el príncipe y la princesa comenzaran a salir, la historia probablemente terminaría con un final feliz.

Y vivirían felices para siempre.

Pero… estamos en el mundo real.

Cuando empiezas a salir, nada termina.

La historia continúa.

Las parejas y los cónyuges, independientemente de la edad, que prometieron amarse para siempre, no siempre permanecen felices.

A veces rompen.

A veces se divorcian.

Y en nuestro caso… somos una pareja con una diferencia de edad de más de diez años.

Que todo saldrá bien y no habrá problemas a partir de ahora… Eso es muy poco probable.

“En la vida real, una relación no hace más que empezar con el noviazgo. Los problemas y accidentes que ocurrían antes de empezar a salir no son nada comparados con los nuevos. Aunque no suena tan convincente viniendo de una mujer que se ha divorciado tres veces.”

“Ajaja…”

Fue una autoburla sin gracia, pero no tuve más remedio que disimularla con una risa amistosa.

“…Pero bueno, lo siento. No estoy tratando de estropear tu estado de ánimo o ponerte en un aprieto. Es solo que… parece que yo seré tu próximo obstáculo.”

“¿Eh…?”

¿El próximo obstáculo?

¿Oinomori-san?

“En serio, por qué tiene que ser ahora… No es que lo esté haciendo a propósito, simplemente llegó en un momento muy inoportuno”, murmuró en un tono apologético, ignorando mi confusión.

Y luego, con una voz bastante seria, continuó.

“Katsuragi-kun, a partir del próximo mes… ¿te gustaría trabajar en Tokio?”

8 comentarios sobre “Musume Janakute Mama ga Suki nano!? Volumen 4 Capítulo 4

  1. creo que el autor no quiere dar rienda suelta a la novela, estaría bien dejar un bonito desenlace ahí pero me da curiosidad como hará para mantener a «flote» esta novela

    Me gusta

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.